viernes, 19 de diciembre de 2008

Manifiesto de despedida

Solo un hasta pronto para quienes aprecio desde la profundidad de mi existir. Estimadas y valiosas colegas, permítanme elevar mi voz para realizar un gesto de despedida. Si recuerdan cómo empezamos el año académico, seguramente se deben reír con la barriga mirando al cielo (como decia mi abuelito)y, por supuesto, deben tener pulsaciones encontradas dentro de ustedes, por un lado, de alegría por iniciar una nueva ventura rumbo al éxito, y por otro, de tristeza porque partirán de esta su casa que las vio crecer, jugar, reír y llorar. Yo, como tantas mañanas he recorrido las aulas, parecen vacías sin ustedes, pero no es así, están llenas de esperanzas, de sus voces matutinas, de sus carcajadas, con la catequista, con las primas, con las jefas, etc. Las hemos extrañado estos días, yo seguía pensando en la obra de teatro que no llegamos a presentar, pero a la vez, como le dije a la Directora del elenco, esta debe ser la mejor obra que hemos hecho, ya que no se representa en un escenario sino la llevaremos al estreno cotidiano en la misma vida. Me permito, con la venia de ustedes, mis conspicuas coleguitas, dejarles mi último pergamino que es lo único que me queda:
1) El presente y el futuro están en sus manos. Busquen la respuesta a sus vidas tratando de ser siempre auténticas. Después de tantos días, mi media neurona activa, ha comprendido que ustedes son capaces de llegar a ser personas magníficas, alegres y felices. Nunca olviden que están preparadas para el éxito (como decía mi tío Anaximandro).
2) Cuando se les presente un fracaso, tómenlo como una oportunidad de probar la fortaleza de sus existencias. No se deben sentir ahogadas o destruidas, levanten la vida y caminen con dignidad. Los que triunfaron en la vida se cayeron mil veces, y se levantaron mil y una vez, allí está el meollo del éxito, y sé que ustedes se levantarán infinitamente. No dejen que la belleza de sus vidas se marchite en el fracaso, aliméntenla con el agua del esfuerzo, con el aire de la autovaloración y con la caricia suave de la dignidad.
3) Estimadas coleguitas, las admiro por el gran esfuerzo que hacen, a pesar de muchas limitaciones que tenemos en nuestro país.
4) Llena tu corazón de gratitud, dale las gracias a tus padres por el esfuerzo diario; a tus maestros y maestras por el empeño, buscando que ustedes sean mejores; a las hijas de la caridad por su labor a favor del necesitado; no olvides llevar siempre dentro de ti el carisma de Vicente de Paúl.
Ahora que ha llegado el momento de despedirse, también ha llegado el instante de los augurios mejores para ti. Que todos los esfuerzos realizados no se queden en el intento de ser mejor, sino que trasciendan los límites y vayan al encuentro del éxito. Tú estás preparada para triunfar; ya sabes el camino que debes seguir no de perturbes pretendiendo seguir un camino que no te corresponde. Largos años han servido para probar en el crisol de la vida tu valor, tu importancia, tus dones, ya no tienes que demostrar nada sino desarrollar todas esas posibilidades. La vida te espera hoy más que nunca. Enfrenta los óbices y levántate de cuanta caída se presenta en tu caminar. Hoy ponemos tu vida en tus manos, quizás ya no tendrás exigencias, obligaciones del mundo exterior, pero te debes tener a ti misma para exigirte, invitarte a ser una humana digna, solidaria y esforzada.
Toda despedida hace que los seres humanos crezcan; el dolor de decir adiós nos hace más fuertes, para ir por la vida buscando nuestra realización. Hoy, en el momento del adiós, la propia vida te tomará el examen que si tiene un sentido profundo y real, estoy seguro que lo aprobarás.
Gracias por los momentos gratos, gracias porque contigo aprendí que el esfuerzo tiene sentido, y que el mañana no solo será esperanza para nuestro país sino una realidad, porque tú contribuirás a que la vida sea digna. Hasta pronto jefas y maestras, soy ante ustedes el peor de los vendedores de pergaminos, su discipulo que las admira,
gbs
Recuerdos








1 comentario:

karitto dijo...

Bueno profesor Gilmer lo unico que le puedo decir es GRACIAS por toda esa enseñanza que nos a dado a lo largo de este año he aprendido varias cosas...y eso gracias a usted y claro a mi por ponerle empeño...

Le deceo un FELIZ AÑO...

Con aprecio, respeto y mucho cariño su catequista karito...

Cuidese un monton y espero verlo el otro año en el colegio pues ire a visitar...jajaa


GRACIAS...